08 octubre 2011

Ejercicios de nostalgia

Reconozco que me gusta ejercer la nostalgia. Con moderación, eso sí, pero sin tregua. Cada vez recurro más a sus servicios. Supongo que cuando nos vamos haciendo mayores y caen los años a la saca uno detrás de otro, se tiende a tirar de la nostalgia cuando se necesita. Y tal y como vienen dadas, se necesita, y bastante.


Mi peña en las fiestas del Pueblo (1998)

Ahora que me acerco peligrosamente al cambio de dígito en las decenas, noto que sin razón aparente me pongo a recordar momentos pretéritos de efímera felicidad, incluso de mi adolescencia más lechona. No es que defienda el "cualquier tiempo pasado fue mejor", que realmente no es así si se reflexiona mínimamente. No hay que engañarse. Tendemos a idolatrar nuestro pasado y solo nos acordamos de lo bueno (el cerebro es muy selectivo). Realmente todas las épocas vitales tienen sus cosas buenas y sus cosas reguleras, pero estos ejercicios de nostalgia, siempre que no se abuse de ellos, reconfortan.

Y hoy precisamente me ha vuelto a pasar. Tener una buena parte de las fotos de tu vida escaneadas y al alcance de un clic es demasiado tentador. Aquellos maravillos años ...

Etiquetas: , , ,