20 abril 2006

Cicerone por obligación

Después de la tempestad viene la calma, dicen. Pero en mi caso sigo sin cumplir los estereotipos al uso. Para un fin de semana de relajo que cabía esperar que fuera el próximo, resulta que viene a la meseta el hermano de la Sra. Bedel y hay que enseñarle la city.



Me armaré de paciencia y sacaré a relucir el poco espíritu ciceroniano que me queda. Total, como todo Madrid está en obras, pues para ver obras mejor nos quedamos en casa viendo la Formula 1 no? :-)