28 agosto 2005

Haberlos haylos

Tenía pensado no escribir hoy. Más que nada porque me conozco y sé que tengo todas las papeletas para que el post sea atormentado y apesadumbrado, depresivo y deprimente. Ya voy amagando estos días y según pasa la jornada, la asfixia y el agobio van increscendo y llegarán a su cenit por la noche. Normalmente mis domingos tienen connotaciones desencantadas. El de hoy por partida doble.

Y es que sí, mañana vuelvo al trabajo. Direis que no es para tanto, que soy un exagerado. Pero tengo por delante un otoño confuso, tormentoso, complicado, y no he sabido (o podido) cargar mis pilas y descansar en estos días. Sigo con la tensión con la que me fuí. No tengo buen feeling. Y eso se nota.

Intentaré pasar lo mejor posible lo que queda de día (se que no lo conseguiré, pero habrá que intentarlo) y no pensar en problemas. Que haberlos haylos.